MILWAUKEE – Con la ofensiva de los Yankees aún por despegar por completo, Aaron Boone cambió el medio de su alineación el sábado, con ganas de “revolver un poco”. Al menos durante un juego, el resultado fue esencialmente un beso de chef. El nuevo cuarto bate Alex Verdugo comenzó las cosas con un jonrón de tres carreras en la primera entrada, estableciendo el tono para lo que vendría el resto de la noche cuando los Yankees superaron a los Cerveceros, 15-3, en el American Family Field.
Las 15 carreras marcaron el máximo de la temporada para los Yankees, con los nueve miembros del orden de bateo inicial llegando a base al menos una vez. Consiguieron 19 hits, el máximo de la temporada, incluidos cuatro jonrones (tres de ellos antes de que los Cerveceros usaran un jugador de posición para lanzar las dos últimas entradas) con la mitad reorganizada del orden justo en el corazón de toda la anotación.
“Eso estuvo bastante bien, ¿verdad?” Boone dijo con una sonrisa. “Es bueno ver a todos contribuyendo y teniendo una gran noche ofensiva. Ojalá podamos terminar una buena serie [el domingo]”.
Gleyber Torres, que estaba pasando apuros y quedó séptimo bateando el sábado, eclipsó su total de carreras impulsadas de la temporada en un turno al bate de ocho lanzamientos en la tercera entrada.
Se fue hacia el otro lado para un doble de tres carreras ante el derecho Joe Ross que puso el marcador 6-1, uno de sus tres hits de la noche.
“Increíble, increíble”, dijo Torres, quien tuvo dos carreras impulsadas en 27 juegos hasta el sábado. “Por fin hago algo por el equipo, sobre todo en esa situación. Mucho trabajo en la jaula, [práctica de bateo]. Finalmente veo los resultados de esta noche y me siento feliz. Creo que será una gran noche para descansar y tratar de hacer lo mismo [el domingo]”.
Aaron Judge y Anthony Rizzo, este último bateando sexto por primera vez esta temporada en lugar de cuarto o quinto, agregaron jonrones de dos carreras en la sexta entrada para abrir el juego.
Verdugo, quien bateaba cuarto por primera vez como Yankee después de haber bateado generalmente sexto o séptimo al principio, continuó haciendo uso de su bate caliente, igualando a Rizzo y Torres con un esfuerzo de tres hits, el tercero de la temporada.
Y Giancarlo Stanton culminó la explosión ofensiva con un jonrón de tres carreras en la novena entrada ante el jugador de cuadro Owen Miller para poner el marcador 15-1.
“Ayuda a relajar a todo el equipo”, dijo Verdugo, quien está bateando .350 en sus últimos 18 juegos, sobre una noche como esta. “Tres carreras al principio fueron un gran respiro. Cuando GT llegó allí y consiguió ese doblete con las bases llenas que lo despejó, sentí que ese era el factor decisivo. Ese fue el gran golpe. Ver a GT, que ha luchado un poco, seguir trabajando y apegarse a su enfoque, empezando a ver que realmente vale la pena.
